domingo, 29 de septiembre de 2013

Manda "premio" al...

Hola a tod@s!! Hoy toca una pequeña reflexión:

El otro día estaba escuchando una conocida emisora de radio de música y entre los típicos anuncios habló el presentador del programa en cuestión haciendo una pregunta muy clara: "¿quieres ganar 3.000 euros?"  Luego reflexiona para sí mismo y para todos los radio-oyentes diciendo que claro, que quién no va a querer ganar 3.000 euros. Lo que hay que hacer es bien fácil: simplemente manda la palabra "premio" al ---- y por 1,25 euros el mensaje puedes ganar 3.000 euros!!!

Realmente no sé cómo funciona este tipo de promoción. Esto es: no sé quién realmente se queda el dinero de los mensajes, si una compañía telefónica (la de cada persona que manda el mensaje) o si es una especie de "apaño" en el que el dinero de los mensajes se lo quedan los que ofertan la promoción. En cualquier caso, está claro para mí, que a razón de 1,25 € el mensaje, a nada que algo menos de 3.000 personas lo manden, el resto son ganancias para los organizadores.

Dicho esto, no puedo dejar de ver que con todo, la persona que gane los 3.000€ se lleva un dinero que los demás han "donado voluntariamente". Si ese dinero se lo lleva alguien a quien le hace mucha falta es genial, lo malo es que seguro que habrá habido más gente con necesidades económicas que haya jugado a esa "lotería" y haya perdido un mínimo de 1,25 €.

Hay un no sé si refrán que dice que "si te hace falta dinero, no juegues a la lotería". En mi opinión ese tipo de concursos juega con la avaricia de la gente, que se puede gastar el dinero para que le toquen 3.000 € pero luego somos incapaces de dar lo más mínimo a quien de verdad más lo necesita. Y sí, soy consciente de que esto se puede aplicar también a la lotería de Navidad, por ejemplo, ahora que se acercan las fechas. Y creo de corazón que el que te toque la lotería puede convertirse en una maldición (de hecho ha habido casos), pero ya habrá tiempo para profundizar en eso...

Espero que paséis buena semana y ¡feliz principio de Otoño!

lunes, 16 de septiembre de 2013

Cómo hacer pasta fresca

Hola de nuevo!!
Después de un tiempo sin poder estar por aquí por fin retomo las entradas. Ha sido un tiempo de mucho trabajo y necesitaba relax, pero ya estoy de vuelta.

La entrada de hoy es sobre cómo hacer pasta fresca casera. Algo facilísimo y que a mí me relaja bastante.


Todo empezó con el programa de Masterchef. Una de las pruebas era realizar un plato de pasta y todos tenían una maquinita para hacerla fresca casera y empecé a investigar a ver cómo se podía conseguir una (Amazon y otras webs). Yo creo que la proyecté tanto que en cuestión de poco tiempo me la encontré en un supermercado de mi ciudad (me la compré sin dudarlo porque era de una de las mejores marcas que había visto por internet) y a la semana pusieron una oferta de Lidl jaja.

Aunque la máquina facilita el proceso, no es fundamental para hacer la pasta. Empezamos!!

TIEMPO: 1 hora, aunque hay 30 minutos en los que tiene que reposar y se pueden aprovechar para otras cosas (15 entre mezcla y amasado, 30 de reposo, 5-10 de estirado y corte)

DIFICULTAD: muy fácil. 

INGREDIENTES:


200 gr. de harina (de la normal)
2 huevos a temperatura ambiente (los míos son L).
(Sí, nada más!! Alucinante! Se puede echar una pizca de sal e incluso un chorrito de aceite, aunque tened en cuenta que al cocer la pasta se le echa sal)

La clave es 1 huevo por cada 100 de harina.






PASOS:
- Hacer una montaña con la harina y en el centro un hueco donde pondremos los huevos: un volcán. Yo os recomiendo hacer lo mismo pero en una ensaladera, así no hay problema de que se nos desparrame por la mesa en caso de que se rompa la pared del volcán (sí, hablo desde la experiencia jaja).

- Batir los huevos dentro del volcán e ir incorporando la harina poco a poco. Cuando tengamos todo más o menos mezclado lo echamos a una superficie limpia y empezamos a amasar.

- Después de unos 10 minutos de amasado, la masa tiene que quedar suave, flexible y húmeda: ni pegajosa ni seca. En caso de que veamos que se pega, añadiremos poco a poco harina, y si está algo seca nos mojaremos las manos para que la masa vaya absorbiendo el agua poco a poco. Después la envolvemos en papel film y dejamos reposar unos 30 minutos a temperatura ambiente.

- Pasado el tiempo de reposo cortamos la masa en porciones y la vamos pasando por la máquina. Si no tenéis máquina hay que coger el rodillo e ir estirando la masa. En la máquina el procedimiento es el siguiente:

  • Se pasa por la parte más ancha de los rodillos 4-5 veces enharinando un poco el trozo de masa antes de la primera vez y en las sucesivas si vemos que hace falta. Entre vez y vez hay que doblar la masa en 3 y pasarla girándola 90º.
Aquí veis cómo hay que doblarlo y cómo tiene que pasar.
  • Después se pasa una vez por cada número más bajo hasta llegar al que queramos. Para pasta de tipo tallarines y spagghetis que es lo que tiene mi máquina lo dejo en el nº 3 de 6.
  • Se cuelgan las planchas para que sequen un poco. El tiempo mientras se hacen las demás planchas.
Este truco lo encontré por internet y es
bastante más barato que comprar un secador
de pasta.

  • Se pasa la manivela al rodillo de corte que elijamos y se pasan las planchas. Al salir la pasta cortada es bueno espolvorear un poco de harina para que no se peguen las tiras entre sí.
En este caso elegí spagghetis.














Y ya está. Ahora solo quedaría cocerla en agua salada ¡¡muy poco tiempo!! (en mi caso no llega a 2 minutos) y añadir la salsa que más nos guste. 

Aquí sólo hay la mitad de la masa cocida.

También se puede hacer pasta de colores, rellena... pero en esta entrada he preferido poner la más básica. He leído que se puede congelar la masa o guardarla para otro día sin cocer aunque no lo he probado. Sería una buena forma de ahorrar tiempo, ya que lo que más lleva es el amasado y reposo. Lo de la máquina, una vez que le coges el truco se hace bastante rápido.

Espero que os animéis a hacer pasta fresca, solos o en compañía ¡que también se pasa muy bien!